La Consejería de Agricultura y Agua ha conseguido controlar la plaga del agusanado del nogal (Carpocapsa) en Moratalla, dirigiendo las aplicaciones y reduciéndolas mediante la utilización de trampas con feromonas.

El director general de Industria Agroalimentaria y Capacitación Agraria, Ángel García Lidón, destacó que la "Consejería fomenta desde hace años las técnicas de cultivo y control de plagas de mínimo o nulo impacto ambiental, con lo cual se ha adelantado a las exigencias que ahora vienen impuestas desde la Unión Europea".

En este sentido, apuntó que el pasado mes de septiembre el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente aprobó un Real Decreto para conseguir un uso sostenible de los productos fitosanitarios, que contempla medidas y obligaciones, entre otros, para el sector productor, que deberá encaminarse hacia la gestión integrada de plagas y las técnicas alternativas.

Tales exigencias, según García Lidón, "no supondrán un mayor coste para los agricultores, sino un ahorro importante en productos y tiempos de aplicación, mano de obra y maquinaria, como se ha puesto de manifiesto en esta experiencia de control del agusanado del nogal en Moratalla, que puede hacerse extensible al manzano y al peral".

El responsable autonómico indicó que "la menor aplicación de fitosanitarios y su correcta elección supone reducir problemas ambientales y disminuir la posibilidad de que aparezcan resistencias, así como una menor afección a la fauna útil que mantiene a raya otras plagas como los ácaros".

Ensayo de nogal

La Oficina Comarcal Agraria (OCA) del Noroeste, realiza un ensayo de 14 variedades de nogal y técnicas de poda, que pretende determinar las características vegetativas y productivas de cada una de ellas para transferir al sector las más adaptadas y rentables. Al mismo tiempo se lleva a cabo, con la finalidad de evitar su agusanado, un conteo semanal de las capturas de mariposas, responsables de originar la plaga.

Según Pedro José Guirao, director de la citada OCA, las larvas de la plaga, provenientes de las puestas de esas mariposas, forman galerías buscando las semillas y en los orificios, más abundantes en el contacto entre frutos, se acumulan restos oscuros de serrín húmedo. Esto provoca importantes daños como la caída y la pudrición de los frutos.

Trampas con feromonas

Los dos tratamientos realizados los pasados meses de mayo y junio, cuando las trampas con feromonas indicaban máximos de vuelo, han servido para controlar completamente la citada plaga, hasta el punto de no detectar ni una nuez agusanada. Esto contrasta, según Pedro Guirao, con los seis o siete tratamientos que es preciso realizar en cultivos intensivos de nogal o manzano para mantenerlos protegidos durante el período sensible, de mayo a septiembre, por parte de aquellos agricultores que desconocen el desarrollo del vuelo y los momentos óptimos de tratamiento.

En este sentido, apuntó que mientras la captura de adultos no supera un nivel crítico, establecido en 0,8 capturas por trampa y día para el cultivo y la zona, no se realizan aplicaciones contra dicha plaga. Cuando ese umbral se supera es señal de que se está produciendo una puesta de riesgo y, en función de la temperatura, comenzará el agusanado en seis u ocho días, por lo que, sólo entonces, se aconseja realizar un tratamiento con un producto ovicida o larvicida.